–Hola.
–¿Cómo estás?
–Bien por aquí. ¿Y por allá?
–¿Cuánto me cobrarías por diseñarme la portada de un libro?
–¿Lleva solapas o es una portada sencilla? ¿Qué tamaño tendría?
–Yo quiero anunciar el libro antes de publicarlo como hacen los norteamericanos, con una fecha concreta de publicación. Tengo el título y tengo el concepto, pero necesito que alguien me haga el diseño de la portada. Ahora mismo la solapa no la tengo que hacer, ni la contraportada. Solo necesito la portada.
–Digamos que sería la primera parte del proyecto y después se culminaría, ¿cierto?
–Sí.
–Necesito un brief de qué es el libro, inspiraciones que hayas encontrado, y que me digas qué quieres lograr visualmente con esa portada
–OK. Te envío también la imagen que tengo en mi cabeza.
Esta conversación por WhatsApp tuvo lugar el 17 de agosto del 2020. Merece la pena recordar que, para esa época, la pandemia de COVID-19 seguía teniendo un fuerte impacto y el mundo todavía estaba lidiando con sus graves efectos, sin una vacuna disponible y con muchas regiones aún bajo estrictas medidas de control.
En el caso concreto de República Dominicana, para esa época, estábamos en medio de un aumento en los casos de COVID-19, con fuertes medidas de control y un sistema de salud presionado, mientras la nueva administración gubernamental recién comenzaba a enfrentar la crisis.
En medio de aquella incertidumbre, sentía la necesidad de crear y compartir un libro que sirviera como un “kit de supervivencia” que ayudase a las personas y las organizaciones a gestionar aquella difícil situación y relanzarse una vez superada esa crisis.
La intención era noble y los posibles beneficios para muchas personas, evidentes. Pero solo había un matiz muy importante.
A esas alturas, no había escrito ni una palabra del libro… Sí tenía dispersos algunos conceptos e ideas que había creado de forma aleatoria y guardado en un Powerpoint, así como varios apuntes en libretas de algunas herramientas y matrices mentales con las que había gestionado, reinventado y ayudado a resurgir mis empresas en los peores momentos de la pandemia. Pero estimo que este contenido no llegaba al 5 % de lo que sería el producto final.
Alguien al leer el anterior párrafo podría preguntarse: ¿Él tenía a duras penas esbozado solo un 5 % del contenido y ya quería anunciar públicamente el libro, y contrató y pagó el diseño de la portada? La respuesta es un rotundo sí, ya que esto me obligaría a enfocarme en escribir y publicar el libro para cumplir mi palabra.
Al anunciar esa futura publicación, estaría aplicando algunas estrategias personales que me han funcionado a través del tiempo para salir de la zona de confort o cuando existe la mínima posibilidad de que mis pensamientos limitantes boicoteen mis sueños y tomen el control de mi destino.
La primera estrategia –que explico en la introducción de mi primer libro Las 12 preguntas– consiste en asumir un compromiso ineludible que no me dé otra opción que no sea la de seguir adelante. En ese momento, mi razonamiento era que, tan pronto yo anunciara la publicación de ese segundo libro, habría asumido un compromiso público al que no podría rehuir.
De hecho, al solicitar el diseño de la portada, estaba también aplicando la estrategia antes mencionada de asumir un compromiso, pues, el haber pagado por el diseño de la portada era ya, de por sí, un excelente elemento motivador. Pero mi intención iba un poco más allá.
Lo que hice a continuación es lo que lo que denomino «acciones adelantadas intencionalmente». Esto consiste en hacer cosas de forma muy anticipada con la intención de que estas acciones previas me proyecten al futuro que deseo, me motiven y me movilicen a dar pasos concretos para alcanzar mi objetivo.
Tan pronto me entregaron las opciones de portada propuestas, encargué un dummy del libro con páginas en blanco y lo puse en mi escritorio en un lugar visible. Tan solo el hecho de estar visualizando lo que podría ser mi libro terminado y la película mental del momento de su lanzamiento, fue un excelente combustible para mantenerme motivado a continuar.
Finalmente, ese tan esperado día del lanzamiento visualizado llegó. Hoy, precisamente, inicia la preventa de RESTART: Acciones clave para superar los desafíos y alcanzar tus metas. Y no podemos estar más contentos y satisfechos con el producto final.
No quiero terminar este post sin una reflexión valiosa. Merece la pena indicar que la portada final del libro no es ninguna de las primeras opciones que realizamos.
También debo mencionar que, por consejo de algunas personas muy conocedoras, no anuncié el libro públicamente. Al final, opté por decirle a todo el que me quisiera escuchar que estaba escribiendo mi segundo libro. Muchas de estas personas me preguntaban constantemente sobre el estatus del libro y del progreso que estaba haciendo, lo cual, a su vez, me comprometía personalmente con ellas.
Pero lo más interesante aún es que, contrario a mi percepción de que me tomaría solo un año escribirlo, desde aquella conversación sobre la portada a la fecha han pasado cuatro años. Y no puedo estar más agradecido de que haya sido así, pues, en este tiempo, el contenido se ha enriquecido enormemente.
En definitiva, eso es lo valioso de asumir compromisos anticipados y acciones adelantadas para impulsarte a lograr tus metas. Estos te pueden ayudar a lograr tus objetivos, pero, en muchas ocasiones, te presentan nuevos caminos y posibilidades cuyos resultados son maravillosos.
Gracias a todos los que me han apoyado y acompañado para que este sueño sea hoy una realidad.
Si quieres descubrir de qué se trata RESTART, te invito a acceder a este link.